jueves, 23 de febrero de 2012

Capítulo 2.- Huston Fried

Esa noche Tom soñó con esa pareja de ancianos:
-¿Quiénes eran?- se repetía Tom a cada segundo en su cabeza.
 Daba vueltas y vueltas en su cabeza, como si su mente conectara con esas dos personas vistas esa tarde. A la mañana siguiente Marie vino a buscar a Tom para seguir enseñándole aquella cúpulla llamada: Huston Fried. Para Tom un pueblo fantasma el cual ni el mismo sol se acercaba a medio palmo, para Marie un pueblo el cuál era mayormente recuerdos de su infancia.
-Marie...¿me quieres decir quiénes eran esos dos armarios de ayer?- la miró intensamente a los ojos.
-Tom...¡Son mis abuelos tonto!, a veces se pasan de graciosos...Ven te los presento.
 Tom sentía cada vez más miedo cuándo su cuerpo penetró en el umbral de aquella puerta chirriante, como si de un fantasma con cadenas se tratara.
-¡Abuelo, abuela...He regresado...y con compañía!-dijo Marie intentando asustar a Tom.
-¡Pero si es el novio de nuestra Merie!- dijo Watson, el abuelo de Marie.
-¡Es Marie abuelo!- Le reprendió Marie a este.
 La abuela de Marie era más "siniestra" apenas hablaba y no apartaba la vista de Tom, el cuál le temblaban las piernas como gelatina aunque se hacia el fuerte.
-¿y bueno Tom... qué te parece este pueblo?- le dijo Anna. la abuela de Marie.
-Pues...¿bonito?- Tom se quedó anodadado al oír la voz de aquella mujer.
 Tom tuvo que salir de aquella casa, su conciencia se lo pedía más y más.
-¿Qué te pasa Tom- le dijo enseguida Marie.
-No lo sé, necesitaba tomar aire...Tus abuelos, son majos- le dijo este.
 Marie sentía desconfianza de él... Esa noche Tom no cenó y enseguida subió a su cuarto. Sentado en su ventana veía el bar "Huston weets", el bosque y el pozo seco.
 Tom no se lo creía, era Marie e iba de camino al bosque de Huston Fried.

miércoles, 22 de febrero de 2012

Capítulo 1.- La mudanza

-¿Pero qué?- dijo Tom al ver el "nuevo" pueblo en el que iba a vivir.
- No te preocupes Tom verás que harás nuevos amigos- le dijo su padre para tranquilizarlo.
 En los ojos de Tom había miedo, todo para él era extraño. Era un adolescente normal, de 16 años una inocente criatura, delgado como un palillo y tan alto como el último árbol caído en una guerra. A lo lejos Tom vió a una persona que le resultaba familiar.
- ¡Marie!, ¿qué haces tú aquí?- Sonrío Tom como si fuera su última sonrisa.
- ¡Vivo aquí,Tom! en realidad estoy con mis abuelos ya que mis padres con el tema del trabajo pues...
 A Tom solo le importaba que Marie estaba en ese pueblo fantasma donde el único vecino que tenían eran las termitas del trastero.
-¡Marie!, si que has crecido desde la última vez, ya sabes el tema del trabajo y demás- dijo Peter, el padre de Tom.- Hijo, vete con Marie ella te ensañara tu nueva Ítaca-.
 Marie y Tom caminaron durante horas, apenas viendo a cinco o seis habitantes en aquel pueblo que parecía una cúpula para evitar el contagio.
-Seguro que este pueblo no es famoso en sus guías turísticas- sonrío Tom.
- ¡jajaja!, tú siempre tan humorista.- dijo ella.
 Tom al fondo de todas esas casas mal formadas vió una pareja de ancianos, tomando el té de las cinco, pero con una peculiaridad que a Tom le preocupaba.
-¿Quiénes son esos ancianos?-dijo Tom
¿Qué ancianos...?-contestó Marie.
 Ya en aquella casa diferenciada de los demás no había nadie...Tom empezó a preocuparse.

Prólogo.

Tom, desde que aquel día en la biblioteca tuvo esa experiencia...No cambiaría su vida, sino eso sería su vida. Marie, su amiga de toda la vida, desapareció una noche de vuelta a su casa por el bosque de Huston Fried... Tom preocupado desea ir a buscarla, pero al sentir un fuerte dolor de cabeza y cerrar los ojos... Estaba en su cama como si nunca hubiera pasado nada.